El éxito de liderar una coordinación BIM
- Areli Alvarez Arteaga
- hace 2 horas
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CONTENIDO
El éxito de liderar una coordinación BIM
La verdadera clave para liderar una coordinación BIM exitosa radica en el liderazgo y la gestión. Un buen Coordinador BIM no solo resuelve colisiones entre disciplinas, sino que lidera equipos, gestiona flujos de información, facilita la toma de decisiones y asegura que el proyecto avance en la dirección correcta.
En el mundo de la Coordinación BIM, es frecuente encontrar una visión reduccionista del rol del Coordinador.
Muchas veces, se asocia esta figura exclusivamente con la detección de conflictos o “clash detection” mediante software. Aunque esta habilidad es sin duda fundamental, limitar la función del Coordinador BIM a este aspecto técnico es uno de los errores más comunes en la industria.
En este artículo, exploramos diez puntos esenciales que subrayan la importancia del liderazgo y la gestión en el rol del Coordinador BIM.
1. Comprender el proyecto en su totalidad
El primer paso para liderar una Coordinación BIM es comprender el proyecto más allá del modelo 3D. Esto implica conocer los objetivos estratégicos, los hitos clave, los plazos y las expectativas del cliente.
Un modelo puede estar impecablemente coordinado, pero si no responde a los objetivos del proyecto, su valor es limitado.El Coordinador BIM debe actuar como un nexo entre lo técnico y lo estratégico, entendiendo cómo su trabajo contribuye a la entrega de valor al cliente.
2. Facilitar la comunicación entre equipos
Uno de los mayores desafíos en un entorno BIM es asegurar una comunicación clara y continua entre todos los actores del proyecto. El Coordinador BIM debe tener la capacidad de traducir requerimientos técnicos a un lenguaje comprensible para arquitectos, ingenieros, constructores y otros stakeholders.
Más que un experto en software, se necesita un facilitador de comunicación, alguien que mantenga alineados a los equipos en cuanto a objetivos, responsabilidades y entregables.
3. Anticiparse a los problemas, no solo resolverlos
Liderar una coordinación BIM de forma eficaz no espera a que los problemas aparezcan en el modelo. A través del conocimiento del proyecto, la experiencia en procesos constructivos y una actitud proactiva, puede anticipar riesgos y tomar medidas preventivas.
Esto requiere liderazgo: tomar la iniciativa, plantear alternativas y promover reuniones de revisión incluso antes de que los problemas sean evidentes en un clash report.
4. Promover la colaboración, no solo la coordinación
La coordinación BIM puede lograrse a través de reglas, procedimientos y herramientas. Pero la colaboración requiere una cultura. Un buen Coordinador BIM entiende que el éxito del proyecto depende de la disposición de los equipos a trabajar juntos, compartir información y resolver problemas de forma conjunta.
Fomentar la confianza, la transparencia y la corresponsabilidad entre los participantes es una tarea de liderazgo que trasciende lo técnico.
5. Gestionar expectativas y conflictos
El Coordinador BIM suele estar en el centro de tensiones entre disciplinas: decisiones de diseño, cambios de última hora, discrepancias de criterios o problemas de cumplimiento con los estándares.
Aquí, la gestión emocional, la negociación y la capacidad de mediar son tan importantes como el dominio del software. Liderar implica saber escuchar, equilibrar intereses y encontrar soluciones que beneficien al conjunto del proyecto.
6. Dominar los procesos, no solo las herramientas
Aunque las herramientas BIM son esenciales, no deben ser el centro del rol. El verdadero valor del Coordinador está en su comprensión de los procesos: cómo se estructura la información, cómo fluyen los datos, cómo se gestionan las entregas, y cómo se vinculan los modelos con los usos BIM definidos (planificación, presupuesto, gestión de obra, mantenimiento).
Esto requiere una mentalidad de gestión, enfocada en resultados y no solo en geometría.
7. Asegurar el cumplimiento de estándares y normas
Uno de los roles clave del Coordinador BIM es garantizar que los modelos cumplan con las normativas del proyecto, ya sean internas (BEP, estándares de empresa) o externas (como la norma ISO 19650).
Pero esto no se logra solo revisando modelos. Implica formar a los equipos, definir flujos claros de trabajo, validar entregables, y corregir desviaciones sin bloquear el avance del proyecto.
Este equilibrio exige liderazgo firme y comunicación efectiva.
8. Conectar la visión técnica con la visión del cliente
Muchos clientes no entienden la terminología técnica del mundo BIM, pero sí entienden de plazos, costos, y calidad. El Coordinador BIM debe ser capaz de traducir lo que sucede en el entorno digital a un lenguaje claro para el cliente y los distintos equipos de trabajo.
Esto posiciona al Coordinador como un interlocutor de confianza, y no solo como un técnico detrás de una pantalla. La capacidad de representar al equipo frente al cliente es una competencia clave de liderazgo.
9. Formar y empoderar a los equipos
El Coordinador BIM no debería cargar con todas las tareas técnicas ni ser el único que entienda los procesos. Un líder eficaz forma, guía y empodera a los demás profesionales del proyecto para que trabajen con autonomía y responsabilidad.
Esto genera equipos más sólidos, menos dependientes, y proyectos más resilientes. Delegar, compartir conocimiento y fomentar el aprendizaje continuo son cualidades de gestión que marcan la diferencia.
10. Construir confianza, dentro y fuera del modelo
Finalmente, un modelo bien coordinado no es solo un producto técnico. Es el reflejo de un equipo que ha sabido trabajar en conjunto, respetar los acuerdos, y mantener una comunicación efectiva.
La confianza no se impone, se construye día a día con liderazgo coherente, decisiones justas y una actitud abierta al diálogo.En entornos BIM complejos, la confianza puede ser el factor que más influye en la fluidez del proyecto.
Conclusión: liderar una coordinación BIM
La Coordinación BIM es mucho más que la detección de interferencias. Es un proceso complejo que requiere liderazgo, gestión, comunicación y una comprensión profunda del contexto del proyecto.
Limitar el rol del Coordinador BIM a un perfil técnico es desperdiciar su verdadero potencial. Los proyectos que realmente aprovechan la metodología BIM son aquellos que entienden que el Coordinador debe ser también un gestor de personas, procesos e información.
Invertir en el desarrollo de estas habilidades blandas —a menudo subestimadas— es clave para transformar la coordinación técnica en una coordinación estratégica, alineada con los objetivos del proyecto y del cliente.Porque antes que coordinar modelos, se trata de liderar equipos.
ACERCA DEL AUTOR. https://mdtarquitectura.com/
TRANSCRIPCIÓN: Areli Álvarez Lean Construction México®
